martes, 14 de agosto de 2012

Niños 2.0


En numerosas ocasiones en el blog se ha hablado de las redes sociales, de su impacto entre la juventud, de sus peligros, del malware que corre por dichos sitios, de su esperada evolución y boom. Pero nunca se ha hablado extensamente de la tecnología que esta surgiendo gracias a este tipo de sitios.

Este es el caso de un dispositivo que en su día despertó un nuevo nicho de mercado, los Poken. Dispositivos USB de una capacidad variable (2Gb, 4Gb) capaz de almacenar todos los perfiles 2.0 (Twitter, Facebook...). Este dispositivo sirve como intercambiador seguro, mediante el choque entre los dos sensores, de la información personal. El objetivo de Poken, es el intercambiar la información de forma segura y conociendo el perfil a agregar dentro de la red social. De esta forma, utilizando el dispositivo a conciencia, se pueden añadir nuevos perfiles conociendo a la persona física que los adueña y, de esta forma, por ejemplo, evitar o por lo menos disminuir casos de acoso sexual dentro de la red.

A día de hoy, pasados ya 1 año, estos sistemas han caído prácticamente en el olvido y en el desuso. Pero justamente, a lo largo de este mes, ha salido al mercado un nuevo dispositivo, Petimo, encaminado a la interacción de las redes sociales con el público mas joven (5-10 años).

Este dispositivo, permite a su joven usuario interactuar con sus amigos/as tanto en el mundo real, como en el virtual (mediante avatares). La agregación de un nuevo contacto/amigo se lleva a cabo mediante el choque entre los dos dispositivos. La información de los contactos es intercambiada vía RFID entre los dos dispositivos situados muy cercanos entre sí. Por esta razón y a primera vista, el sistema tiene dos vías de ataque posibles, una las personas que ya viene teniéndonos acostumbrados y, otra, mediante ataques Man in the Middle al sistema RFID.

En conclusión, a lo largo de estos meses/años se verá como evoluciona este tipo de tecnologías y si despiertan el mismo interés entre la población que las redes sociales. Si tuviesen el mismo auge, en concordancia con el artículo presentado hace unos días por el departamento de e-crime, los ataques para los próximos meses seguirán pasando por los dispositivos móviles, redes sociales y, como no, por las personas físicas.